Con todo lo recorrido hasta ese día y aún impresionados con la Bahía de HaLong, comentábamos mi padre y yo la sensación que teníamos de haber vivido lo mejor del viaje. Estábamos convencidos de que ya pocas cosas nos iban a impresionar más, pero nada más lejos de la realidad. Aún teníamos por delante lugares magníficos que conocer en Vietnam y experiencias inolvidables por vivir en el trayecto de Hoi An a Hue.
Comenzamos el séptimo día de viaje partiendo hacia My Son, una antigua ciudad imperial en ruinas del reino de Champa, declarados por la UNESCO Patrimonio Histórico de la Humanidad. Tan solo quedan restos arqueológicos de diferentes épocas, pero tras la pasar por el centro de visitantes donde nos explicaron la historia y patrimonio del reino Champa, nos hicimos una idea de la magnitud y peso en en la cultura vietnamita. Realmente interesante…
Tras un almuerzo típico de la zona, (por cierto, nos encantó la gastronomía vietnamita), nos trasladamos por carretera desde Hoi An a Danang, y desde ahí a Hue, donde pasaríamos la noche en un bonito hotel. El cansancio acumulado apenas interrumpía las ganas que teníamos de seguir conociendo lugares.
Amanecía en octavo día de viaje y, tras coger fuerzas en el hotel con un buen desayuno, hicimos un crucero fluvial por el río Huong Giang (río del Perfume) con una típica embarcación vietnamita. Destino: la Pagoda de Thien Mu. Conocida como la Dama Celestial y emplazada en lo alto de una colina, se trata de una gran torre ortogonal de 7 plantas, supone una de las imágenes más representativas de Vietnam y clara seña de identidad de la antigua ciudad imperial Hue.
¡Ojo al dato! Uno de los pabellones de Thien Mu alberga una gigantesca campaña de bronce de 2.000 kilos!!!.
Posteriormente, conocimos la Ciudad Imperial, en el centro de Hue, que sirvió de modelo para la ciudad prohibida de Pekín, donde aún se conservan varios monumentos de la dinastía Nguyen.
Más tarde, nos encontramos con la Torre de la Bandera o Columna de la Bandera, una inmensa bandera que ondeaba orgullosa a unos 30 metros del suelo, que puede verse desde cualquier punto de la ciudad, lo que supone un gran punto de referencia para orientarse. A continuación nos esperaba la imponente puerta Ngo Mon, entrada principal al recinto imperial, y la residencia Dien Tho, lugar donde vivió la madre reina.
Antes de comer, nos dio tiempo a visitar el Palacio Thai Hoa, con la Sala de los Mandarines (su decoración es una pasada), y las Nueve Urnas Dinásticas.
La tarde la ocupamos en recorrer el Mercado de Dong, donde los locales montan sus puestos, llenando de un color y olor las calles que aún hoy parece que sigo reconociendo. Muy recomendable. Tras un largo día, tocaba 
descansar y relajarse en el espectacular hotel «Pilgrimage Village Boutique Resort & Spa» que incluía el itinerario preparado por iClubviajes.com (espero no daros mucha envidia en el vídeo XD). Eso sí, no perdimos la ocasión de disfrutar del gran ambiente nocturno de Hue.